EDITORIAL: Más vale prevenir…
Manuel Muiños Amoedo, presidente de la Revista PROYECTO
Sin duda alguna este número de la revista PROYECTO nos hará recordar esa expresión de todos conocida y tantas veces repetida de “más vale prevenir que curar” o la variante “más vale prevenir que lamentar”. Nuestros colegas ingleses dirían “prevención is better than cure”. Más allá de la expresión está el contenido de la misma, eso es lo que ha de hacernos pensar y reflexionar. Seguramente las páginas que se irán abriendo ante nuestros ojos nos harán poner cara de asombro y de sorpresa. Tal vez hasta removerán nuestro interior y con un poco de suerte destaparán la caja de Pandora para que nuestros sentimientos vuelen y nos hagan tomar conciencia del vacío existencial y “la insoportable levedad del ser”, que diría Milán Kundera, en la que viven muchas personas. Una existencia que muchas veces lleva a estas personas a tomar decisiones inadecuadas tratando de buscar contenido a su vida, sin darse cuenta y tomar conciencia de que lo realmente trascendente es dar sentido a ese contenido. Movernos en una sociedad dónde, cada vez más, lo que preocupa y ocupa al ser humano es el envase, la imagen, la apariencia, la vanidad, el ego, … Una sociedad donde cada vez más la tolerancia a la frustración es menor. Una sociedad dónde identificar, expresar y gestionar sentimientos resulta difícil para unos e imposible para otros, nos lleva a situaciones de despiste generalizado y a un estado de confusión que poco o nada facilita alcanzar la plenitud de la existencia del ser humano. Quizá el camino de la prevención esté necesitando una buena dosis de rehumanización, aderezada con el enfoque biopsicosocial que PROYECTO HOMBRE trata de poner en valor en el día a día. Ese enfoque no deja que queden al margen la educación, la salud, la familia, las unidades de convivencia correspondientes, …
Sin duda alguna la tarea es ardua y difícil a la par que necesaria, pero no por ello imposible. Quizá un frenazo, o cuando menos reducir la marcha para leer los diferentes artículos y digerir su contenido, nos ayudará a tomar conciencia de la importancia de la prevención para evitar situaciones realmente dolorosas y angustiosas como las que, cada vez más, estamos viendo y viviendo. Las personas con problemas de adicciones y las que cada día optan por poner fin a su existencia de manera repentina, tratando de huir de una vida que consideran un infierno, nos están poniendo por delante que algo no va bien o que algo estamos haciendo mal, más allá de esta pandemia de la COVID-19 que ha despertado todo tipo de reacciones y actitudes ante la vida. Sea como sea, no podemos dar la callada por respuesta ni cruzarnos de brazos. No podemos dar la espalda a esta cruda y dura realidad. Es importante tratar de incrementar, potenciar y poner en valor todos los programas de prevención que estén a nuestro alcance y sean más humanamente rentables, sobre todo necesarios, más que políticamente correctos. Prevenir no solo es posible si no muy necesario. Más vale prevenir…